La silepsis es un recurso literario que permite la utilización de términos que no concuerdan con el tiempo verbal, pero permite una reiteración de la idea principal y es por ello su aceptación, por ejemplo: la mayoría de los jóvenes acudieron (pasado) a la ciudad (en lugar de “acudió” en tiempo presente que es de cuando se habla).
La silepsis consiste en emplear un término contrario en tiempo, género, o número verbal para denotar reposición de una idea. La utilización de estos conceptos es aceptada gramaticalmente siendo ya de uso común en las escrituras.
La silepsis persigue la coherencia, un significado opuesto en tiempo, género o número, utilizando un verbo pasado para referirse a una acción presente o futura, por ejemplo: la mayoría nadó (silepsis de número, en lugar del verbo nadaron, por hablarse de varias personas).
Aceptación gramatical
La silepsis es aceptada gramaticalmente en las escrituras, no como una utilización de términos de forma errónea. Su realce probablemente sea más denotativo de forma oral que escrita, pudiendo confundir en un principio al receptor por las ideas opuestas. Literariamente es utilizada para otorgar omisión (minimizar ideas) en la oración.
Ejemplos de silepsis
Silepsis de número:
- Con silepsis: La mitad de los perritos (plural) murió (singular) / Sin silepsis: La mitad de los perritos murieron.
- Con silepsis: La mayor parte (singular) murieron (plural) / Sin silepsis: La mayoría murieron.
- Con silepsis: José perdió las llaves (plural) del coche y la calma (singular).
Silepsis de género:
- Con silepsis: La juez / Sin silepsis o lo contrario: El juez / La jueza.
- Con silepsis: La médico / Sin silepsis o lo contrario: El médico.
- Con silepsis: La agente / Sin silepsis o lo contrario: El agente.
- Con silepsis: La ministro / Sin silepsis o lo contrario: El ministro.
- Con silepsis: La jefe / Sin silepsis o lo contrario: El jefe.