La prudencia es una habilidad que se va desarrollando a lo largo de la vida y que permite ser un individuo pensante y crítico hacia los comentarios que se expresarán sobre las actitudes o situaciones con otras personas. La prudencia es una administración de información que evita las ofensas o reacciones negativas.
Ventajas de la prudencia
- Evita difundir falsos testimonios o exagerar hechos que no lo ameritan.
- Se logra disimular incomodidades interiores que puedan crearse por situaciones, personas o comentarios ajenos.
- No ofender a los demás por la imprudencia de transmitir opiniones fuera de lugar o bochornosas.
- Una persona prudente es una persona decente que piensa en el bien común.
10 ejemplos de prudencia
- Cuando un ser querido muere la familia es prudente al explicar las razones de su fallecimiento para no causar revuelos entre los conocidos o falsos testimonios.
- Estando en un centro comercial y se entra a una tienda para ver los precios de la ropa, se es prudente en las reacciones faciales para que el vendedor no se dé cuenta del presupuesto alto o bajo que se tenga para gastar.
- Reírse en un tono bajo, tapándose la boca mediante la utilización de las manos para que el sonido no sea molestia para los demás presentes, es signo de prudencia.
- Tener una cantidad alta de dinero en la cuenta bancaria pero no estar divulgándolo para fomentar valores negativos en los demás como envidias o celos, es una forma de ser prudente.
- Un joven que esté enamorado de una chica y deba hablar con esta, será prudente en lo que le dirá, desde el saludo hasta el contenido de la conversación para no caer en chistes ofensivos ni en adjetivos indecentes.
- Al ir caminando y tropezarse con una rama se puede ser prudente en no causar molestias exageradas, por su parte quitar la rama del camino para que a otra persona no le ocurra lo mismo.
- Pensar antes de actuar o expresar alguna idea es ser prudente ya que se analizan los pros y los contras de transmitirlo así como la mejor manera de hacerlo para que no sea de incomodidad para los demás como para consigo mismo.
- Si llega el día del pago laboral se logrará ser prudente cuando se ahorre una cantidad considerable en vez de derrochar todo el dinero al instante.
- Cuando se vea a una persona que está vestida con ropa añejada no se debe juzgar o actuar con expresiones discriminatorias.
- Si se va caminando muy tarde en la noche por la casa se deberá tener prudencia de no tropezar o hacer ruidos que puedan despertar a los demás.