La densidad, es una presentación de los elementos naturales cuando no están en su temperatura ambiente visualizándose como una masa, puesto que su potencial es menor al del agua separándose las partículas cuando se mezclan con los líquidos.
La densidad de un elemento es propenso a cambios según la temperatura, pudiendo cambiar del estado líquido a denso, como también la densidad puede provocar gases si aumenta la temperatura, o cambiar de denso a líquido puesto que se dilatan los compuestos.
Tipos de densidad
La densidad puede medirse según el contenido de agua que intervenga en la composición con un elemento que sea equitativo, por ejemplo: el aceite. Esta, sería una densidad relativa al agua. También existe la densidad absoluta que es una menor cantidad agua respecto al elemento.
La densidad además de su potencial alto o bajo con respecto al agua, puede medirse también de acuerdo a su cantidad de volumen o capacidad de ocupar un espacio. La densidad es pues el tamaño en masa o grosor de un elemento.
Ejemplos de densidad
- En ciencias, la densidad del acero es mayor que la del algodón, ya que el acero ocupa menos volumen que el algodón. Aún cuando el acero pese más, la densidad se fundamenta en volumen o espacio.
- Socialmente se puede referir a la densidad como el número de habitantes que residen en una zona en particular, puesto que la suma de ellos ocupara un espacio.
- Los aceites, presentan una densidad absoluta, puesto que sin añadirles agua ya poseen un volumen propio.
- La densidad también proporciona compactibilidad al elemento, ya que si tiene mucha densidad quiere decir que no es frágil, por ejemplo: el oro.
- Todo lo existente presenta densidad, y su volumen se medirá de acuerdo al espacio que ocupe, siendo un camión más denso que una bicicleta.