Los adagios son verdades resumidas en ámbitos específicos. Esto quiere decir que son parte de la jerga utilizada para referirse a una historia, anécdota, frase, consejo o acontecimiento sobre una situación determinada, pero de forma breve, donde los involucrados deben tener conocimiento previo sobre la situación.
Al ser parte del lenguaje de un conjunto determinado de personas, puede convertirse en palabras claves o clichés de uso exclusivo para los que intervengan en un grupo social.
Por ejemplo: cuando un médico conversa con otro médico y tienen referencias hacia situaciones en las salas de consulta, están haciendo uso del adagio.
Adagio o jerga
La jerga es un lenguaje el cual es desarrollado por emisores y receptores específicos los cuales manejan un mismo nivel de conocimiento, pudiendo ser entre abogados, ingenieros, médicos, periodistas, jóvenes, niños o cualquier grupo social donde se manejen términos de entendimiento.
Por ejemplo: “voy a chambear” en la jerga juvenil quiere decir: voy a trabajar.
El adagio por su parte es describir brevemente una historia donde se utilice además de una jerga compartida, situaciones o personajes de conocimiento para quienes estén recibiendo el mensaje. Por ejemplo: una convención de abogados en donde se relaten antecedentes.
Ejemplos de adagios
- Se pueden presentar los adagios como versos que incluyan un mensaje moral o de consejo hacia las demás personas, por ejemplo: “haz el bien y no veas a quien.”
- En las terminologías de un grupo específico para incluir contenido que solo manejen los involucrados: para la creación de hidrocarburos se requieren de componentes carbónicos potenciales para la creación de gases inflamables.
- Los adagios son esencialmente resúmenes de acontecimientos que estén involucrados en ámbitos específicos: en 1988 Jacinto Convit fue nominado para el premio nobel de la medicina.
- Dentro del lenguaje social, los adagios cumplen el rol de apelar a la atención y a las acciones de los individuos para restringirlos, protegerlos o educarlos, por ejemplo a través de mensajes como: “si bebes, no conduzcas.”